Un corte de limpieza y esperar es una buena alternativa, pensando en cortes futuros.
Las claves para manejar las pasturas según el Ingeniero Agronomo Pablo Cattani serían las siguientes:
E l clima ayuda y trajo el alivio. Con algunos milímetros en el perfil del suelo, las decisiones a tomar no van a ser tan aleatorias y podemos trazar una línea de conducta en la toma de decisiones.
Un excedente de pasturas, sobre todo de alfalfa debería venir en camino para los próximos días y allí es donde debemos tomar decisiones acertadas.
Por lo antes dicho, si en la zona geográfica en donde estamos produciendo, nos ayuda la temperatura con muchas horas al día por encima de los 15°C y podremos secar forraje.
No debemos dudar en hacer un “corte de limpieza” o como nos gusta decir a algunos “resetear” el lote para que los cortes futuros sean buenos en calidad y cantidad, lo cual nos va a ayudar en gran medida en cuanto a costo de forraje producido.
De este corte ya sabemos que la calidad no va a ser buena, viene de heladas y del inverno lo cual incrementa el porcentaje de fibra y baja la digestibilidad, además de tener un volumen de forraje escaso, lo cual incrementa el costo por hectárea cuando aplicamos maquinaria al consumo y el costo de alimentación en general.
Si no tenemos temperatura, indudablemente no va a ser posible secar el forraje y allí la mejor opción va a ser el ensilado, aunque sin volumen ni calidad, la cosa se complica un poco más.
El silaje puede ser el camino alternativo si no acompañan las temperaturas, aunque será un poco más complicado.
Entonces, la mejor opción quizás sea “cerrar los ojos” realizar el corte de reseteo, sabiendo que será de mala calidad y alto costo, y buscar el destino adecuado de esa fibra sin calidad como por ejemplo, engordes a corral o categorías que lo acepten desde el punto productivo como la cría, para destinar los mejores cortes que vendrán más tarde, para las recrías o categorías con mayores demandas de digestibilidad.
Una vez cosechada la fibra que nos deja la salida del invierno y con agua en el perfil, deberíamos esperar y un próximo corte más vigoroso, con mayor producción y con calidad asegurada, siempre que se lo haga en el estadio fenológico adecuado.
Un dato no menor para este primer corte del año, es no mirar la floración, la cual seguramente será despareja y ya que vamos a apuntar a volumen para bajar costo productivo no importa que esté avanzada.
Lo que si debemos mirar con atención, es que al momento del corte, no toquemos el rebrote basal, porque es éste el que nos va a determinar los días de retorno a esa parcela.
En definitiva, debemos tener una visión de mediano alcance pensando en lo que viene, sabiendo que lo que hoy nos sale un poco más costoso por volumen y calidad, en 30 días, nos debería determinar un corte con mayor volumen y la calidad adecuada y esperada para un forraje conservado con base alfalfa.
Ya a partir del próximo corte (segundo de la campaña), con lotes “reseteados”, calidad más asegurada y cantidad acorde, podremos pensar en silajes de pastura cuya cantidad y calidad de forraje permitan una inserción en las raciones que demanden forrajes altos en proteínas, que se dejen comer muy bien y con una digestibilidad acorde al objetivo productivo.